MÉXICO.- La obesidad afecta el desarrollo económico del país dado que, de acuerdo con el Instituto Mexicano de la Competitividad (Imco), 184 mil empleos formales se encuentran inactivos por incapacidades diversas que propicia ese mal y, por lo mismo, esas plazas están en peligro de perderse.

Además, el Imco destaca que las incapacidades que se dan por padecimientos que están dierctamente relacionados con la obesidad provocan una pérdida de 400 millones de horas de trabajo productivo anual.

La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), que cuenta con 4.2 millones de trabajadores formales, destaca que la obesidad y las enfermedades crónicas propician entre las empresas generadoras de empleos pérdidas anuales por 11 mil 500 millones de pesos.

Óscar Hernández, presidente de la Comisión Nacional de Salud y Protección contra Riesgos Sanitarios de la Coparmex, explicó que las empresas de ese organismo aportan más de 40 por ciento del producto interno bruto, por lo que la afectación a la salud de los empleados repercute en la productividad del país.

La falta de un “sistema de salud eficiente, que sea capaz de controlar esta pandemia y otorgar tratamiento oportuno” es una de las causas por las que México se encuentra rezagado en competitividad y productividad, señaló Hernández.
Pierden el trabajo

Martín Rojano, especialista del Hospital Manuel Gea González (HMGG), destacó que “la obesidad provoca diversos problemas, entre ellos, el de la movilidad… y si las personas ya desarrollaron una enfermedad crónica como diabetes, deficiencias renales, afecciones coronarias o cáncer, por lo regular llegan a perder su trabajo”, destacó.

Rojano, coordinador de la Clínica de Obesidad del HMGG, explicó que una gran cantidad de afectados recurre a todo tipo de dietas y se somete a procedimientos quirúrgicos en clínicas clandestinas que ponen en riesgo su vida.

El HMGG es de las pocas unidades sanitarias en el país que están certificadas para realizar intervenciones quirúrgicas de alta complejidad en pacientes con obesidad severa, es decir, personas que pesan de 150 hasta 280 kilogramos.

Cada año el hospital atiende a 5 mil pacientes por obesidad que, antes de ser intervenidos quirúrgicamente, se someten a tratamientos multidisciplinarios, como apoyo psicológico y psiquiátrico para controlar la ansiedad compulsiva por comer, además de un estricto régimen nutricional y diversos estudios clínicos.

De 100 procedimientos quirúrgicos que realizan cada año en esa instalación sanitaria, la mayoría pierde alrededor de 60 por ciento del peso excesivo, además de que, paralelamente, controlan mejor la diabetes y reducen la necesidad de administrar insulina.

Procedimientos

En el HMGG se realizan tres tipos de procedimientos, según el tipo de pacientes. Uno consiste en la colocación de un balón gástrico que se introduce en el estómago y tiene una duración de seis meses, cuyo efecto es generar una sensación de saciedad más temprana.

Este procedimiento se otorga tanto para los pacientes que tienen sobrepeso (de 10 a 15 kilos), como a aquellos con obesidad severa que necesitan bajar para someterlos a intervenciones quirúrgicas mayores.

La efectividad depende de que el paciente se apegue a una dieta rigurosa y oscila en 30 por ciento.

Otro procedimiento que se ha incrementado de manera importante a escala mundial, explicó Rojano, es la manga gástrica, que consiste en engrapar el estómago para disminuir su capacidad.

“Se reduce aproximada de 60 a 80 mililitros, de ahí que su efectividad sea elevada, superior a 50 por ciento”, detalló.
Cuando se trata de pacientes con obesidad severa (más de 100 kilos) se opta por el bypass gástrico, que es el más común y con mayor eficacia probada.

“Este procedimiento crea un reservorio gástrico de aproximadamente 30 a 50 mililitros y también se hace de manera lamparoscópica”, aclaró.

Una vez que el paciente es operado se le da seguimiento para vigilar su evolución y se fortalecen los buenos hábitos alimenticios. La rehabilitación física también forma parte del tratamiento.

En un hospital privado este tipo de intervenciones sobrepasan los 400 mil pesos, pero en el HMGG los pacientes pagan hasta tres veces menos, según su nivel socioeconómico.

NOTA DE MILENIO.-