MÉRIDA.-  Las casas antiguas en riesgo de derrumbe en el centro histórico de Mérida han disminuido, porque de 26 que estaban por desplomarse, 17 fueron restauradas por sus propietarios, de modo que bajó a nueve el número de predios que con posibilidades de venirse abajo.

Lo anterior fue expuesto por el director de Gobernación de la Comuna, Rafael Pinzón Miguel, quien destacó que hace dos años el Ayuntamiento comenzó a tapiar todos los predios peligrosos, aunque eso trajo como consecuencia que los peatones tengan que caminar en la calle, como el mismo alcalde Mauricio Vila Dosal ha reconocido.

El funcionario indicó que 17 predios ya no representan un riesgo para la gente, pues fueron restaurados, y los nueve restantes siguen protegidos, incluso les cambiarán las tapias (bardas de madera) porque ya están muy gastadas.

Pinzón Miguel manifestó existen en total 500 casas antiguas que fueron descuidadas por sus dueño; de ese número 26 representaban un grave riesgo.