MÉRIDA.- La gente de Yucatán conoce y sabe de toros. Hoy lo demostró, como dándole una cachetada con guante blanco al empresario que se atrevió a organizar una temporada en el Coliseo Yucatán: la Plaza Mérida lució prácticamente llena, pues unos 4,500 aficionados llenaron los tendidos de esta vetusta plaza, mientras que la semana pasada apenas 1,500 fueron al  escenario ubicado en la carretera a Progreso.

Prácticamente un lleno en la Plaza Mérida, pues las localidades de sol y sombra general estaban abarrotadas y sólo se veían algunos claros en barrera de sombra, los boletos más caros, y en barrera de Sol.

IMG-20151213-WA0048La corrida dio inicio a las cinco en punto, cuando había poco más de tres cuartos de plaza y una larga fila de aficionados esperaba para entrar al coso de Reforma.  Todo estaba pintado de la mejor manera para una fiesta brava.

Aunque la gente de Yucatán sabe de toros, no faltaron los villamelones que acudieron al coso taurino atraídos por el mano a mano entre Eulalio López “Zotoluco” y la figura mexicana del momento Joselito Adame.

Volvieron al ruedo de Reforma numerosos políticos y funcionarios públicos que ocuparon asientos en barrera, ya sea de Sol o de Sombra. Ahí estaban Luis Hevia Jiménez, recién nombrado delegado del Issste; Limber Sosa Lara, director del DIF Yucatán; Fernando Rosel Flores, delegado de Banobras; Ariel Castillo, funcionario de la Secretaría de Salud; Fernando Medina Gamboa, ex delegado de Sedesol, y el director de la Policía Municipal de Mérida, Mario Romero Escalante.

También estaban la presidenta estatal de Movimiento Ciudadano, Silvia López Escoffié; los regidores meridanos Mily Romero, Tonatiuh Villanueva Caltempa y Arturo Sabido Góngora, y el ex regidor Felipe Duarte Ramírez, entre muchos otros.

IMG-20151213-WA0046Fue una tarde de toros, con un clima agradable, a la que salvó el último astado de nombre “Villancico” y de 520 kilos, al cual Joselito le cortó una oreja, la única de la corrida, de modo que se convirtió en el ganador del mano a mano. Los cinco astados anteriores, aunque de buena presencia carecieron de clase y de casta, pues rehuyeron a la faena. Todos fueron de la ganadería de Mimiahuapam.

Sin embargo, lo más importante fue que la gente de Yucatán conocedora de las corridas de toros, respondió al llamado, no como la semana pasada, cuando unas 1,500 personas fueron al Coliseo Yucatán. Paras disfrutar de los toros, sólo la Plaza Mérida y los yucatecos lo saben.- José Sierra Herrera.