MÉRIDA.- El TDAH es un trastorno o síndrome conductual que tiene tres diferentes tipos de síntomas: dificultad para prestar atención en ciertas tareas de manera moderada a grave, ser demasiado activo, inestabilidad emocional y el actuar por impulso.
Este se desarrolla con mayor frecuencia en los niños, puede persistir hasta la edad adulta y tener un impacto negativo en la vida de esa persona.
Es por ello que un pronto diagnostico puede descartar cualquier problema ya sea neuronal o conductual.
Los psiquiatras explican que este trastorno puede tener puntos de comparación hasta en un 80% con otras enfermedades psicológicas o neuronales, como es el autismo o el trastorno específicos del lenguaje e incluso irritabilidad.
Es por ello que deben ser llevados con los especialistas correspondientes, que harán los estudios necesarios y en caso de padecerlo comenzar un tratamiento que beneficie al menor.