CHELEM PUERTO.- Cientos de fieles católicos de esta comisaría celebraron ayer viernes el 109 aniversario de la llegada de la imagen de la virgen de la Medalla Milagrosa a este puerto, mientras que el Gremio de Marítimos festejó el miércoles pasado 91 años de fundación.
La fiesta de la llegada de la virgen se realizó con una misa, una procesión por las principales calles y un paseo en lanchas por la ría y en las actividades participaron poco más de mil feligreses de esta comisaría y otras comunidades cercanas.
El Gremio de Marítimos celebró los 91 años de festejar a la Medalla Milagrosa y, como es tradición cada 26 de noviembre, el gremio recorrió las calles con sus estandartes y pabellones al son de la charanga jaranera.
Después de la misa del jueves, a las 8 de la noche, hubo quema de fuegos pirotécnicos, un torito y un barquito. El gremio de Marítimos después de participar en la procesión de la Medalla Milagrosa, entró a la casa de su nuevo presidente Carlos Manuel Valle.
La misa de la Medalla Milagrosa se llevó al cabo ayer viernes a las 10 de la mañana y la ofició el presbítero Augusto Romero Sabido, administrador parroquial, quien se hizo cargo de la parroquia el lunes 9 pasado.
En su mensaje ante las decenas de feligreses, el padre Sabido Romero los exhortó a festejar a la Medalla Milagrosa con acciones de amor al prójimo e indicó que el que ama a la virgen María, lo demuestra en su trabajo diario, en la pesca, laborando como albañil o en otros oficios.
Recordó que la fiesta de la Medalla Milagrosa data de 1830, cuando la virgen se mostró ante la monja Santa Catalina de Labourne, en París, Francia. Dijo que la imagen está parada sobre un mundo que sufre, y la virgen pisa la serpiente en señal de que permanece firme en su combate del mal; indicó que los rayos que salen de las manos de la santísima virgen son la gracia de Dios.
El sacerdote, quien dijo que apenas lleva dos semanas al frente de la parroquia, exhortó a los feligreses a vivir todos los días como una comunidad y sana convivencia en la parroquia.
También dijo que en el tiempo que lleva en la parroquia de Nuestra Señora de la Medalla Milagrosa, en sus oficinas unos entran y otros salen y todos dicen “ese que salió es conflictivo”, que ya es una frase acuñada en el puerto, así que dentro de poco van a decir “el padre es muy conflictivo”, por ese motivo los exhortó a que todos hagan un esfuerzo para llevarse mejor.
Al término de la misa y antes de la procesión, el padre Augusto Sabido precisó que por instrucciones del señor Arzobispo monseñor Gustavo Rodríguez Vega, en la celebración de la fiesta de la Medalla Milagrosa no hay venta de cerveza en la parroquia, sobre todo porque hay problemas de alcoholismo e indicó que cuando el prelado estuvo de visita en el puerto (en agosto pasado) vio una pared de cervezas, en donde se realizaba la fiesta (en la playa).
-Si en otro lugar donde se realiza hoy la fiesta patronal hay venta de cervezas, la parroquia no tiene nada que ver –aclaró.
La procesión, que encabezó el padre Romero Sabido, partió de las puertas de la parroquia, le dio la vuelta al parque y después enfilaron sobre la calle 20, rumbo al embarcadero, en donde esperaban lanchas adornadas para el tradicional paseo marítimo en la ría.