MÉRIDA.- Vecinos de los fraccionamientos Granjas y Nueva Kukulcán (sur-oriente de Mérida) están hartos del monte que rodea ambas zonas habitacionales que con el paso de los años se ha convertido en un basurero, así como nido de alimañas y de moscos.

Aunque desde hace décadas los ciudadanos que viven por ese rumbo solicitan a las autoridades que implementen medidas para mejorar la seguridad y la higiene lo cierto es que todo sigue igual de mal.

En un recorrido por el rumbo realizado por un representante de este medio de comunicación pudo observarse como el monte es un lunar dentro de la ciudad, sin embargo, no es positivo porque la gente sucia tira ahí sus residuos sólidos.

El representante de este portal observó decenas de bolsas de basura, recipientes que acumulan agua cuando llueve y que son criaderos de moscos, así como olores fétidos.

Aunque la existencia de basura es responsabilidad de las personas que viven por ahí, lo cierto es que si hubiera vigilancia o estuviera cercado este lugar no habría tantos residuos sólidos.

De noche muchas personas, incluidos niños y jovencitas, atraviesan el monte en un pequeño camino de terracería que conecta los fraccionamientos con Circuito Colonias (frente al estadio de beisbol Kukulcán), sin embargo, cada noche es un riesgo porque no hay iluminación y se sabe que ese monte es refugio de maleantes y drogadictos.

Asimismo, muchos vecinos han propuesto que en ese espacio se construya un parque, pero las autoridades hacen caso omiso de esta petición ciudadana.

Mientras ocurre algo la gente sigue tirando ahí su basura, haciendo más grande el foco de infección.