MÉRIDA.- Una nueva versión surgió respecto a la renuncia voluntaria del ahora ex director de El Centenario, William Cabrera Borges: esta versión indica que se metió en un lío por tratar de intercambiar un tigrito blanco por un felino africano de nombre “Cervantillo”, sin la aprobación del Cabildo.

El problema se le salió de las manos a Cabrera Borges porque una “defensora” de los animales se enteró del caso y presionó alegando que había tráfico de animales en el zoológico y la señora armó un tremendo alboroto, que se sumó al error de querer intercambiar a los felinos sin el permiso debido.

Más que por corrupto William renunció por pen….” dijo una fuente confiable, quien relató el lío en que se metió el ahora ex funcionario, por el cual tuvo que dejar el cargo.

William Cabrera pactó el cambio de uno de los cuatro tigres blancos que nacieron en El Centenario y a los que, por medio de un concurso, les pusieron los nombres de Chakte, Dorje, Harshi y Chandra. Todavía no se premia a los ganadores del concurso.

Ayer publicamos que, de acuerdo con fuentes del panismo local, William Cabrera renunció “voluntariamente” a su cargo de jefe del Parque Zoológico del Centenario del Ayuntamiento de Mérida, debido a que ya era insostenible la situación en ese sitio pues faltan muchos animales que fueron mal empleados desde meses pasados, cuando el susodicho ocupaba el mismo cargo en la polémica administración del ex alcalde Renán Barrera Concha.

Sin embargo, la nueva versión dice que hace varios días Cabrera Borges se fue a Cancún a una reunión de directores de zoológicos y de UMAs y ahí, extrañamente acordó con gente de una UMA del estado de México intercambiar uno de los tigritos por un felino africano llamado “Cervantillo”, pero para hacer esto se requiere la aprobación del Cabildo.

El tigre africano llegó al aeropuerto, con todos los papeles en regla, se trajo al Centenario y se alistaron de nuevo los papeles para devolverlo, pero la señora defensora de los animales se enteró y armó un alboroto, pues decía que había tráfico de animales.

Fue muy tonto William por hacer este trato, ya que ni se han entregado los premios a los niños que ganaron el concurso para ponerle nombre al tigrito”, indicó nuestro informante, quien agregó que en El Centenario hay 13 tigres y que intercambiar uno sería hasta bueno.

Después del alboroto armado, el felino africano fue devuelto al estado de México y el tigrito blanco está en El Centenario con sus hermanitos, mientras que William Cabrera es un desempleado más de nuestro estado.