MÉRIDA.- El regidor perredista Tonatiuh Villanueva Caltempa propuso un plan piloto al Cabildo de Mérida que consiste en impedir que las empresas recolectoras de basura y sus empleados sigan pepenando para que los desperdicios lleguen a la planta de reciclado y con ello analizar la posibilidad de que este servicio sea gratuito al ser autosustentable.
El edil de izquierda señaló que este proyecto piloto podría iniciarse con los 70 mil predios que desatendió Pamplona, empresa que cobra por casa entre $11 y $33, dependiendo de la zona.

Si en lugar de que los trabajadores de la empresas concesionadas pepenaran y todos residuos sólidos llegarán a la planta de tratamiento este servicio sería autosustentable y por ende no le costaría ni al municipio ni a los ciudadanos.

Explicó que debido a que las concesionarias pagan “una miseria” a sus empleados, éstos se ven obligados a pepenar y a pedir “sus propinas” , lo que se traduce en una mayor pérdida para los ciudadanos.

El concejal manifestó que en el negocio de la basura el más exprimido es el ciudadano, porque por un lado paga por el servicio, por otro lado tiene que dar “para los chescos” a los trabajadores para que se lleven toda la basura, y por si esto no fuera suficiente las empresas reciben subsidio del Ayuntamiento, es decir, de los impuestos de todos.

Villanueva Caltempa expuso en otros país se produce gas con las plantas de composta, lo cual podría hacerse también en Mérida con la planta que tenemos, por lo que exclamó que “no podemos permitir que el sistema de basura sea como era hace 100 años”.

El edil recordó que esta iniciativa la presentó hace un par de días en la sesión de Cabildo, y que el alcalde Mauricio Vila Dosal se comprometió a analizar este punto, por lo que en comisiones se estudiará más a fondo.