MÉRIDA.- Seguramente las últimas semanas habrán sido de fuertes jaloneos entre los priistas pues todos querían ocupar importantes puestos en el Gobierno del Estado, y las cabezas de grupo no pretendían perder espacios.
Por ejemplo, Nerio Torres Arcila, aunque “se despidió” de la política y de la administración pública todavía tiene injerencia y las “recomendaciones” que hizo para que su gente ocupará cargos de considerable relevancia fueron escuchadas, es el caso del ex regidor de Mérida Rubén Segura Pérez, actual director de Instituto de Seguridad Jurídica Patrimonial de Yucatán (INSEJUPY).

Otro cercano ex colaborador de Nerio Torres es Francisco Lezama Pacheco, quien luego de varios meses de ser encargado del despacho de Sedesol estatal fue designado titular del IYEM.

El concejal priista de Mérida Rudy Pacheco Aguilar es otro incondicional de Nerio, y aunque es el coordinador de la bancada tricolor es el único que representa los intereses del dos veces ex candidato a la alcaldía de Mérida.

En días pasados Omar Corzo Olán, también cercano amigo de Torres Arcila, fue designado delegado en Yucatán de la Procuraduría Agraria.

Asimismo, el ex diputado federal Mauricio Sahuí Rivero se consolida pues fue nombrado secretario de Desarrollo Social; su cuñado y su primo son regidores de Mérida, Alfonso Seguí Isaac y José Rivero Mendoza, y su ahijada política, Marisol Sotelo Rejón es diputada local y secretaria del CDE del PRI.