MÉRIDA.- Todavía sigue como un “don nadie”, pero Jesús Pérez Ballote ya habla, camina, se viste y se siente el presidente del Comité Municipal panista de Mérida, en actitudes reprobables para alguien que se supone aspira a servir no a servirse del cargo, según dijeron varios panistas.
Nuestros informantes dijeron que si llega al cargo, Pérez Ballote repetirá las mismas acciones pedantes que tuvo cuando fue líder estudiantil, cuando incluso organizaba fiestas con “mujeres de la vida galante” y en las que abundaba el licor.
Incluso en las redes sociales circuló un vídeo en el que “Chucho” aparece alcoholizado junto a una suripanta, hecho que recordamos el domingo pasado en esta sección de El Grillo (http://grilloporteno.com/2015/09/13/la-comuna-de-merida-opera-a-favor-de-chucho-perez-ballote/)
Mareado desde antes con el humo del poder, al sentir que lo apoya el alcalde Mauricio Vila Dosal y el presidente estatal panista Raúl Paz Alonzo, Pérez Ballote ya se siente presidente del PAN en esta ciudad. Dicen que Roger Torres Peniche, flamante “operador táctico” del alcalde es el estratega de “Chucho”.
Nuestras fuentes nos dicen que el miércoles pasado acudió al “grito” panista en la mejorada vestido de guayabera, como los diputados y regidores y estuvo en todo el evento con pose de “perdona vidas”.
“Mal empieza la semana para el que ahorcan en lunes”, reza viejo y conocido refrán. Esto le pasará a “chuchito” si sigue con sus poses, que no son de ahora sino de siempre: es pedante, soberbio y arrogante y cada vez que se siente con poder se esmera en demostrarlo.