MÉRIDA.- En un afán de que le redujeran la condena de 22 años que le impuso un juzgado de primera instancia por violación, José Luis Maas Manzano recurrió al Tribunal Superior de Justicia, que le redujo la pena pero le impuso una multa de 30 mil pesos.
Sin embargo, el sujeto quiso que le rebajaran más años de prisión, aunque le salió el tiro por la culata, pues finalmente su sentencia quedó en 21 años dos meses y siete días de cárcel por violar a dos de sus hijastras y cometer otros abusos sexuales, tras decisión del Tribunal Colegiado en Materia Penal y Administrativa.

Por este asunto, su ex pareja Teresa de Jesús Sánchez Cauich también podría ser procesada, pero no se sabe su paradero.

Los hechos ocurrieron en abril del 2007, cuando la pareja empezó a vivir en unión libre en un predio ubicado en la calle 44 entre 113 y 115 de Cinco Colonias, junto con las cuatro hijas de la mujer, que en ese entonces tenían 13, 11, 6 y dos años de edad.

En ese entonces, el tipo empezó con toqueteos contra dos de las menores, a las cuales acariciaba y besaba obscenamente.

Incluso, sostenía encuentros íntimos delante de ellas y, no conforme, les mostraba películas pornográficas “para que aprendieran”.

En una ocasión, cuando violaba a dos de ellas, una de las más pequeñas se asustó y salió corriendo a la calle, donde vio a una tía y le contó lo que había estado pasando.

De inmediato se armó la denuncia, se realizó la investigación y el sujeto fue detenido, aunque la madre de las menores desapareció.
Formal P.-