MÉRIDA.- El mánager de los Leones de Yucatán, Willie Romero, no se arrepiente de las decisiones tomadas anoche, cuando a todas luces dejó en la banca a lanzadores con mejor desempeño en la postemporada, para poner como relevistas en los momentos de mayor apremio a Oscar Daniel Verdugo y Demetrio Gutiérrez, quienes dieron bases por bolas para las carreras de caballito de la sexta entrada, lo que al final le dio el título de la Zona Sur a los Tigres de Quintana Roo.
“Para nada, no me arrepiento. El bulpén me dio una postemporada excepcional, me dio un séptimo juego en la final de la Zona Sur, sería injusto que lo culpe de algo este día”, dijo.
Romero hizo un gran trabajo en la rotación de su pitcheo en los tres juegos previos, lo que le dio la oportunidad de empatar la final sureña a tres triunfos, pero esta noche, desde el punto de vista de este medio, debió utilizar al zurdo Alejandro Astorga o al yucateco Manuel Rodríguez en la sexta entrada, en vez de Verdugo y Gutiérrez, pero el hubiera no existe.
“Me siento muy orgulloso de los muchachos, de mis relevistas. Simplemente no pasó, no hicimos lo que teníamos que hacer en un inning”, recalcó.
Romero agregó que la afición yucateca se merecía una final, pero quien cree en Dios sabe que siempre lo que pasa es lo mejor.
“La afición es única, y doy gracias a la afición yucateca, aprendimos mucho este año para mejorar en el próximo, gracias a Yucatán, a la afición, seguimos creyendo, por lo que tenemos que caminar siempre con la frente en alto”, detalló.
Sobre las claves de la derrota, Romero dijo que dejaron a muchos corredores en base.
“No dimos batazos oportunos, además de algunos detalles fuera de nosotros que fueron muy graves. Pero pasó lo que tenía que pasar. Además, su relevo hizo un gran trabajo, se vieron efectivos”, concluyó.