MÉRIDA.- Cada vez que hay alguna elección, fieles a su costumbre, muchos panistas de doble moral que ven que su candidato puede perder arremeten con todo tipo de acusaciones, agresiones, descalificaciones y hasta con crucifixiones de tipo moral.
Ahora que Raúl Paz Alonzo, ya separado de Cecilia Patrón Laviada, busca la presidencia del Comité Directivo Estatal Hugo Laviada Molina se rasga las vestiduras de su santidad y exige una explicación de por qué muchos líderes panistas apoyan al papá de su sobrinita, que quiere ser el dirigente estatal, aunque estuvo envuelto en un escándalo.
Cita como ejemplo que en Inglaterra renunció un lord británico luego de un escándalo con prostitutas. Pide explicación a los que apoyan a su antes pariente político y pide que la respuesta no sea un silencio cómplice.
Recordamos, que Xavier Abreu Sierra estuvo envuelto en un tremendo escándalo de desvío de recursos de varios millones en el gobierno del primo del doctor, Patricio Patrón, y luego el ex secretario de Desarrollo Social fue nombrado candidato panista a gobernador. No recordamos que esa vez Hugo Laviada haya alzado la voz para pedir que le explicaran porque Xavier era el candidato del PAN, luego del escándalo.
Muchos panista piensan que el moralismo exagerado del doctor se debe más bien a dos cosas: una, a que está desesperado ante una muy posible victoria de Paz, y dos, a que un triunfo de Raúl acabará con los dinos y falsos moralistas del PAN, grupos en los que se puede incluir a Hugo.
La conducta de Hugo exhibe una vez más la doble moral panista: si estás conmigo aunque seas un ladrón, corrupto y perverso no lo digo, pero si te pasas al lado contrario entonces lo diré o de plano lo inventaré.
Los dos casos más recientes que ejemplifican esta doble moral panista fueron los de Alberto del Río Leal y de Mary Yoly Valencia, a quienes de la noche a la mañana crucificaron y tildaron de corruptos, sólo porque los antes mencionados se opusieron al candidato panista a la alcaldía Mauricio Vila Dosal.
En conclusión, podemos decir que el berrinche y las muestras de moral del doctor son más bien producto de la desesperación que de un recto y congruente actuar a lo largo de su vida política, como hemos demostrado párrafos antes.
Por tanto, no merece ninguna explicación de parte de los líderes que apoyan a Paz.- El Grillo.