MÉXICO.- Nuevos estudios médicos insisten en que el ejercicio regular puede ser la mejor manera de prevenir el Alzheimer. Incluso, con mejores resultados que otros métodos cuando la persona ya cuenta con la enfermedad.
El Alzheimer es la forma más común de demencia en personas mayores y afecta su capacidad para realizar sus actividades cotidianas. Un trabajo hecho por investigadores de la Universidad de Copenhagen develó que una mejoría en el flujo sanguíneo a través del ejercicio brinda beneficios al cerebro que aminoran este padecimiento.
Para descubrir esto, se tomaron en cuenta a 200 personas y se les asignó hacer una hora de ejercicio regular. Sus niveles de ritmo cardíaco alcanzaron entre el 70 y 80 por ciento de su capacidad.
Los resultados no sólo mostraron un descenso en los niveles de Alzheimer de los pacientes, sino que una mejoría de su ansiedad y depresión. El Alzheimer empieza afectando el pensamiento, y luego se expande a la memoria y al lenguaje. Esto les impide recordar con facilidad su pasado o el nombre de las personas.
Después de 16 semanas de ejercitarse las personas tenían mejores destrezas intelectuales, que quedaron plasmadas en evaluaciones de aptitudes psicométricas que midieron el lenguaje, la capacidad matemática y la velocidad del pensamiento.
“El flujo sanguíneo se reduce en esas áreas a medida que envejecemos, pero el ejercicio lo aumentó”, dijo la autora de otro estudio, Laura Baker al portal Healthday.
Baker determinó que el ejercicio contrarresta la formación de nudos de proteína que generan el Alzheimer. Logrando un descenso del 14 por ciento de esa clase de proteínas.
Para tomar la muestra, la doctora de la Universidad de Wake Forest, en Carolina del Norte, consideró a 65 personas con un deterioro por Alzheimer inicial, entre 55 y 89 años.
Los participantes se repartieron en dos clases, de estiramiento y de ejercicio regular. La primera tuvo incipientes mejoras en cuanto al Alzheimer. Sin embargo, la segunda, incrementó los resultados de las habilidades cognitivas en un 80 por ciento. En especial, en áreas del cerebro que se encargan de la memoria.
Estos hallazgos serán presentados el jueves en la Conferencia Internacional de la Asociación del Alzheimer en Washington, D.C.
Asimismo, un tercer ensayo reciente realizado en Canadá trabajó con 71 personas que sufrieron accidentes cerebrovasculares. A la mitad se les asignó ejercicio regular, logrando los mismo resultados beneficiosos para la memoria además de en la atención selectiva.
“Esos hallazgos son importantes porque sugieren de forma contundente que una intervención potente en el estilo de vida, como el ejercicio aeróbico, puede tener un impacto sobre los cambios en el cerebro relacionados con el Alzheimer. Ningún fármaco que esté aprobado ahora puede rivalizar con esos efectos”, dijo Baker a Healthday.
En México más de 350 mil personas están afectadas por la enfermedad de Alzheimer y mueren por ella alrededor de 2 mil pacientes cada año, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Neurología y Neurocirugía Manuel Velasco Suárez.
De acuerdo con el instituto, la precisión del diagnóstico con esta evaluación es de aproximadamente 90 por ciento. Pero, la única forma de confirmar al 100 por ciento el diagnóstico de la enfermedad, es estudiando el tejido cerebral con técnicas inmuno-histoquímicas.
Las personas diagnosticadas con Alzheimer pueden sobrevivir desde dos hasta 20 años a partir del inicio de los primeros síntomas. La esperanza de vida es proporcional a los cuidados apropiados y atención médica de los pacientes.
SIN EMBARGO.-