25

PROGRESO.- Una 25 mil personas disfrutaron de las playas de los puertos del municipio, quienes además se encontraron con playas limpias, mar cristalino, cielo soleado y sin amenaza de lluvias, de modo que pasaron un día placentero.

En opinión de vendedores y meseros del malecón, entre ellos de Samuel Chablé,  las vacaciones comenzaron bien, pues a pesar de que no cayó en quincena, muchos paseantes se trasladaron a la costa y vieron que las playas y el mar están libres de la marea roja, que ese fenómeno no representa amenaza para las costas del municipio, pues todo parece indicar que pasará lejos del litoral.

El riesgo de marea roja no importó a numerosos paseantes que se trasladaron a los puertos del municipio progreseño, disfrutaron de un buen día y sin problema alguno consumieron pescado frito, cebiches y botanas de mariscos.

Entre los visitantes que disfrutaron del soleado domingo estuvo el mesero meridano Alberto González Euán con su esposa Raquel Balam Dzul y sus hijos Alberto y Juan. La familia vecina de  la colonia San Francisco Chuburná, llegó en autobús a este puerto,  aprovechando que el jefe del hogar descansó.

La familia ocupó una mesa de una palapa del malecón, pidieron cervezas y botanas, calcularon gastar $600, pues iban a comer pescado frito, comprar dulces para los niños y pagar sus pasajes de retorno a Mérida. Planean retornar hasta el próximo mes.

Sentados bajo una sombrilla y mirando al mar, los carmelitas Abraham Solís, Jesús Amaro y los hermanos Rusell y Herny Aranda, estuvieron de pasadía en la playa, llegaron a  Mérida el sábado y decidieron trasladarse ayer domingo a este puerto para huir un poco del calor que hace en la capital meridana.

Ayer, primer domingo oficial de las vacaciones de verano, de acuerdo con los prestadores de servicios y autoridades policíacas y marítimas, llegaron unos 25,000 paseantes en los puertos del municipio, sin contar con las familias que pasan sus vacaciones en las playas de Chuburná, Chelem, Chicxulub y Uaymitún.

Muchos paseantes aprovecharon la bonanza para meterse al mar para bañarse, en tanto que vacacionistas pasearon en motos acuáticas, lanchas de recreo y yates. Personal de la Armada de México destacado en el malecón estuvo atento para prestar auxilio a los bañistas.

Los restaurantes y pescaderías del malecón, así como a los vendedores de cocos helados, micheladas, mangos y piñas, les fue bien, así como los expendios de cervezas que tuvieron mucha demanda durante todo el día.