PROGRESO.- Jessica Saidén Quiroz, candidata perdedora del PRI a la alcaldía, rompió ayer jueves el silencio y en rueda de prensa y reunión con un grupo de lideresas acusó a los ex alcaldes Porfirio Trejo Zozaya, Enrique Magadán Villamil, José Luis Blanco Pajón y Reina Quintal Recio, de operar en su contra el día del proceso, para que obtuviera menos votos.
También acusó de operar en contra a la ex alcaldesa y diputada electa por el IX distrito María Ester Alonzo Morales, quien en las elecciones tuvo más votos que ella en el municipio.
Asimismo, acusó al empresario Luis Alonzo Morales, hermano de María Ester, como el principal autor intelectual y material que operó para que votaran en contra de los candidatos a regidores, pero no para la de diputados, púes las dos candidatas a diputadas obtuvieron más votos en el municipio que ella como abanderada de la alcaldía.
-Luis Alonzo está molesto porque la actual administración municipal autorizó la instalación de gasolineras nuevas en la ciudad, con lo que se acabó el monopolio, por eso operó en contra, fue el autor intelectual y material de que se votara en mi contra, estuvo recorriendo las casillas –aseguró la ex candidata priista.
Jessica Saidén se desplayó e indicó que en el caso de Enrique Magadán, esposo de María Ester Alonzo, antes del proceso se reunió con él y le dijo que contara con su apoyo, pero que tomara en cuenta que para las próximas elecciones iba su hijo (de Magadán) como candidato para la alcaldía.
-Otro actor político fue la familia del ex alcalde José Luis Blanco Pajón, esposo de la diputada federal María del Carmen Ordaz Martínez, quienes operaron en contra porque la legisladora no salió como candidata y no quedaron conformes.
-Porfirio Trejo, a pesar de que dijo que colaboraría, no lo hizo porque no se le dio una posición en la planilla de regidores –expresó.
Las acusaciones de Jessica Saidén también alcanzaron a Julián Zacarías Curi, ex aspirante de la candidatura a la alcaldía, lo señalan de operar también en contra, al igual que la ex alcaldesa Reina Quintal.
-Todos se dicen priistas, pero lo único que les interesa son sus intereses personales y no el bienestar de Progreso –dijo.
Jessica Saidén, quien se reunió también con un grupo de 50 lideresas, a quienes explicó cómo va el proceso de impugnación, dijo en la rueda de prensa que no fue una candidata impuesta, sino que fue resultado de un consenso.