NoMÉRIDA.- Ninguna empresa puede obligar a sus trabajadores a realizarse la prueba de detección de VIH, ni tampoco puede obligar a los empleados a renunciar en caso de tener esta enfermedad, señaló el Antrop. Jesús Armando Rivas Lugo, quien impartió la conferencia “Discriminación laboral y el derecho al trabajo” en la sede de la Red de Personas Afectadas por el VIH.
La Norma Oficial Mexicana 010-2010 establece que la prueba de detección de VIH solo podrá hacerse con el consentimiento de la persona y debe respetarse la confidencialidad del resultado, manifestó.
El conferencista mencionó que a nivel nacional existe el caso de Yssel Reyes, quien fue despedido del Banco HSBC por vivir con VIH. Y destacó que en Yucatán persiste la discriminación en las organizaciones privadas así como despidos injustificados o la negativa de contratación a las personas con VIH.
Sin embargo, debido al estigma social, el prejuicio y el señalamiento que aún existe sobre la condición de salud, las personas optan por no denunciar públicamente estos casos o evitan evidenciarlo en la prensa, pero no por ello es menos grave y aunque las negativas de contratación o los despidos injustificados sigan sucediendo debemos estar conscientes que esos actos son irregulares y están fuera de la ley, agregó.
En su conferencia, Rivas Lugo explicó las obligaciones de los patrones y las responsabilidades, una de ellas es la obligación de otorgar las incapacidades de maternidad, expedir licencias de paternidad y la obligación de no discriminar por motivos de género, salud y orientación sexual.
De igual forma, indicó que que existen organizaciones privadas socialmente responsables e incluyentes que han revisado sus procesos de contratación para eliminar cualquier práctica que sea discriminatoria.
Son más las empresas que adoptan los modelos que permiten una mejor convivencia y que, además, garantizan los derechos humanos de las personas dentro de la iniciativa privada, finalizó.