MÉRIDA.- El hallazgo de una osamenta en montes de Tzucacab ha generado una serie de conjeturas y especulaciones entre los habitantes.
Las dudas surgen porque nadie ha desaparecido últimamente del pueblo y sus alrededores.
Sin embargo, lo que más curiosidad causa es el hecho que la osamenta fue hallada junto a una bolsa que contenía 10 latas de cerveza, de las cuales ocho están llenas, lo que significa que el “muerto” se tomó dos antes de partir de este mundo.
Además, también se halló los restos momificados de un zopilote y una bolsita con un polvo, lo que, según los “analistas” del caso, tener una idea de lo que sucedió, pues se cree que el polvo es un veneno o insecticida.
Entonces, la deducción señala que la persona a la que corresponde la osamenta murió envenenada y el zopilote tuvo la misma suerte al entrar en contacto con el insecticida.
La osamenta fue hallada por Erasmo Góngora, vecino de la localidad, quien la halló en su terreno, a tres kilómetros de la orilla de la carretera que lleva a la comisaría de Catmís.
Según las autoridades el fallecido podría tratarse de un joven de entre 25 y los 30 años,.
En el lugar se hallaron también los restos de la vestimenta, un pantalón corto de mezclilla, camisa sport y sandalias de hule; igualmente hallaron un bulto de color rojo donde había diez latas de cerveza, ocho llenas y dos vacías.
Cerca había una lata con una bolsa que tenía algún químico, al parecer lanate, usado para “matar” hierba mala.
Los agentes policiacos que dieron fe del hallazgo dijeron que en el municipio no hay reportes de algún desaparecido.
FP.-