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MÉRIDA.- Vencido por la pobreza, la falta de oportunidades y las burlas que recibía por su condición de indígena maya, con tan solo 24 años de edad, José Luis Heredia Cen decidió acabar con su vida en su precaria vivienda de Santa Clara, comisaría de Temozón.
Para ello, el deprimido joven colocó en su garganta una soga de nailon que ató en un palo de su casa de paja y se dejó caer.
José Luis vivía en la calle 13 entre 4 y 6 de dicha comisaría de Temozón, donde su tío Justino Cen Kauil lo encontró y lo descolgó, pero ya nada pudo hacer, pues ya había fallecido.
Agentes de la Policía Municipal de Temozón acudieron a verificar el hecho y tras comprobar la muerte se avisó a la Fiscalía General del Estado con sede en Valladolid, cuyo personal se hizo cargo de las diligencias.
Según se informó, el joven era víctima de discriminación y burlas por su rasgos mayas y por su condición de pobreza.
FORMAL P.-