YahayraMÉRIDA.- Quitada de la pena, Mirna Centeno Ceballos, hermana de la candidata a diputada panista Yahayra Centeno, abandonó desde hace un mes su puesto como jefa de la sala de regidores para hacer campaña junto a su familiar.
Según fuentes del Ayuntamiento de Mérida, la trabajadora municipal, que devenga un salario aproximado de 10 mil pesos al mes, abandonó sus obligaciones con autorización de sus jefes, y por supuesto con goce de sueldo.
La justificación inicial fue que estaba de vacaciones, aunque ya había hecho uso de esta prestación a principios de año.
Todos los empleados municipales tienen derecho a 15 días de vacaciones cada seis meses, es decir, un mes al año; sin embargo, la hermana de la regidora con licencia ya se ausentó dos quincenas, aparte de haberse ido a inicios del 2015 para disfrutar de este derecho que tienen todos los burócratas.
Y todo indica que no tiene fecha para regresar, pues conforme pasan los días la familia Centeno observa como sigue sin levantar el proyecto de Yahayra, ya que solamente 10 o 15 personas acompañan a la edil con licencia a sus caminatas por el distrito II local.
Si esto no fuera suficiente, el esposo de Mirna, Luis Saavedra, cuñado de Yahayra, entró a trabajar hace unos meses al departamento de Recursos Materiales, perteneciente a la Dirección de Administración del Ayuntamiento de Mérida.
Así que la lista de familiares de la candidata a legisladora que cobran en la Comuna sigue creciendo. Con anterioridad informamos que están en la nómina municipal sus primos Juan Güemez Ceballos y Alejandro Ceballos; su tía Ema Rosa recibió crédito del gobierno municipal, a través del programa Micromer, y colocó a su prima Wendy Ceballos en el Comité estatal del PAN.
De conservar el PAN la alcaldía de Mérida será regidora su tía Rosa Ceballos Madera, cuota de Raúl Paz, y seguramente conservaría a sus familiares en la nómina.
Entre los panistas del distrito II local prevalece la idea de que fue el equipo de colaboradores de ella el que hizo un fotomontaje para desprestigiar al candidato perdedor en el proceso interno, Ramón May Euán, que dio pie incluso a una denuncia penal en la Fiscalía General del Estado, razón por la cual no termina de levantar su campaña.
A esto hay que sumar que el PAN en general sigue teniendo problemas para conseguir representantes de casilla, ya que la gente a la que invitan exige un justo pago por estar sentada alrededor de 12 o 13 horas el día de la elección cuidando los intereses de dicho partido.
Sin embargo, los coordinadores de las campañas continúan diciendo que Acción Nacional no paga a sus militantes ya que lo deben hacer “por amor” al partido, aunque ellos sí tienen un salario fijo y de ganar la alcaldía de Mérida tendrán una buena chamba, no así los que salen a caminar, a pegar carteles y a cuidar casillas.