PROGRESO.- Aunque el crucero turístico Carnival Triumph trajo a 3,231 pasajeros, procedente de Cozumel en retorno para Galveston, pocos pasajeros bajaron al puerto y de ellos muy pocos compraron en los tianguis y a los vendedores de diversos artículos, quienes dijero que “hubo muchos bikinis, pero pocas compras”.
Fueron pocos los turistas de la nave que desembarcaron, pues la mayoría se quedó en el barco de recreo y en la zona de artesanías de la terminal remota, en donde también funciona una tienda libre de impuestos.
“Ayer hubo muchos bikinis en la playa y las pocas pasajeras del Carnival Triumph que visitaron la playa del malecón se divirtieron en grupos, unas en el mar, otras jugando volibol o recostadas en camastros donde consumieron bebidas alcohólicas”, afirmó el artesano Luciano López,.
La temporada de springbreakers ya terminó, de modo que ya no viajan universitarios en los cruceros; los estudiantes se concentraban en la playa de un conocido restaurante ubicado en el costado poniente de la glorieta del malecón, pero ayer sólo atendieron a 80 pasajeros, cuando hace dos semanas atendían a 300 en una jornada.
Como muestra de que ayer fue un día flojo, los módulos de masajes se pasaron la mayor parte del día sin clientela, de modo que las masajistas se peleaban a los pasajeros para ofrecerles sus servicios, pero la mayoría lo rechazó, de modo que no sacaron ni para pagar el derecho de piso en el malecón.
Eddie Barbosa, vendedor de sombreros que se instala en la esquina de la calle 80 con 21, trató en vano de vender sus productos, pero los pasajeros solo pasaban, miraban y con además decían que no compraban.
-Este es el crucero más flojo que he visto, pues los pasajeros no compran nada, se ve que gastaron todos sus dólares en Cozumel, los artesanos y vendedores no sacaran ni para sus pasajes –indicó el vendedor.