TAMAULIPAS.-José Sánchez, de 47 años, fue capturado el jueves en el municipio tamaulipeco de Matamoros en una zona habitacional “después de una balacera con policías federales, en la que nadie resultó herido”, dijo en un mensaje a los medios el Comisionado Nacional de Seguridad, Alejandro Monte Rubido.
El funcionario no precisó la organización delictiva a la que pertenece el detenido, pero una fuente del gobierno federal confirmó a la agencia AFP que “fungía como líder de la célula del Cártel del Golfo en Tamaulipas”, donde esa organización ha sido el controlador histórico.
El comisionado declaró que Sánchez García se enroló en el Cártel del Golfo en 2010 “por invitación de Mario Armando Ramírez Treviño”, alias “El Pelón” o “X-20”, detenido en agosto de 2013 y considerado en ese entonces líder máximo de esa organización que opera también en otros puntos del país latinoamericano.
La fuente del Gobierno federal añadió que las autoridades no tienen clara la identidad del actual capo de esa organización.
En cuanto al historial de Sánchez García, Monte Rubido añadió que, “por el nivel de agresividad con que actuaba”, fue escalando “aceleradamente” en la estructura jerárquica del cártel.
“Bajo su mando llegó a tener al menos siete grupos de sicarios, caracterizados por su alto grado de violencia, y los cuales actuaban principalmente en los municipios de Aldama, Soto la Marina y Abasolo, todos ellos en Tamaulipas”, prosiguió el funcionario.
Sánchez García además “cobraba cuotas (extorsionaba) a empresarios, a ganaderos y productores agrícolas”.
Contaba con ranchos de esa región, tomados a punta de pistola, a los que llevaba a secuestrados que asesinaba a sangre fría en caso de no recibir recompensas.
Está también relacionado con los homicidios de dos policías perpetrados en agosto de 2014 y septiembre pasado, y el secuestro de dos agentes de la fiscalía federal cometidos en una fecha no precisada en el mensaje de Monte Rubido.
Su detención se llevó a cabo en el barrio Bugambilias de Matamoros, después de una balacera entre uniformados y pistoleros que finalmente se dieron a la fuga.
Sánchez portaba un arma larga “tipo Barret, 50”, conocida en México como “mata policías” por su poder de penetración incluso en chalecos de protección con el máximo nivel de blindaje.
Tamaulipas, territorio usado por narcotraficantes para el trasiego de drogas a los Estados Unidos, sufre una incesante ola de violencia por disputas entre el Cártel del Golfo y sus ex aliados Los Zetas. INFOBAE.-