La Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos declaró que dará libertad a las empresas tecnológicas para desarrollar nuevos productos en el tema de salud sin una regulación restrictiva, como será el caso del Apple Watch
La Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos declaró que dará libertad a las empresas tecnológicas para desarrollar nuevos productos en el tema de salud sin una regulación restrictiva, como será el caso del Apple Watch

EL FINANCIERO.- La Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos declaró que dará libertad a las empresas tecnológicas para desarrollar nuevos productos en el tema de salud sin una regulación restrictiva, como será el caso del Apple Watch.

En tanto Apple Inc. y otras compañías de Silicon Valley se van acercando al campo de la salud, el organismo estadounidense a cargo de la supervisión dice que dará libertad a la industria tecnológica para desarrollar nuevos productos sin una regulación restrictiva.

Bakul Patel, que está a cargo de la nueva ola de productos de salud centrados en el consumidor en la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA, por sus siglas en inglés), dijo que la mayoría de los dispositivos de vestir, como el Apple Watch, que está por salir a la venta, y las aplicaciones relacionadas con la salud para smartphones tienen un buen camino por recorrer antes de justificar una supervisión minuciosa del organismo.

“Hemos adoptado un enfoque de intervención leve, casi de no interferencia”, declaró en entrevista Patel, director asociado de salud digital de la FDA. “Si alguien tiene tecnología que va a motivar a las personas a cuidar su salud, no es algo en lo que queramos intervenir”.

La FDA está definiendo su función en momentos en que el cuidado de la salud y la tecnología de consumo están fusionándose. Apple, Samsung Electronics Co. y otras empresas fabrican productos llenos de sensores que ofrecen la posibilidad de recolectar todo tipo de datos sobre la presión arterial, la temperatura del cuerpo, los niveles de glucosa, la hidratación, los niveles de oxígeno y el estado del aire exterior. Se están desarrollando algoritmos de software que recogen información sobre la salud de una persona para diagnosticar posibles enfermedades con una precisión que, según sus promotores, puede superar a la de los médicos.

“La FDA se halla en una de las coyunturas más cruciales, si no la más crucial, en lo que hace a modular el novedoso campo de la medicina digital”, dijo Malay Gandhi, director gerente de Rock Health, firma de capital riesgo de San Francisco centrada en la salud.

Una pregunta apremiante es si la FDA y otros organismos cuentan con los recursos y el personal necesarios para supervisar esta industria en rápido avance, destacó Gandhi. El presupuesto anual de la FDA de alrededor de 4 mil 500 millones de dólares representa la cuarta parte de los 18 mil millones de dólares de ganancias que generó Apple en el último trimestre.

Mientras la FDA supervisa dispositivos y aplicaciones, otros organismos federales también se han interesado en cómo interactúan estos productos con la vida de la gente y si hacen lo que dicen hacer o constituyen un riesgo para la privacidad.

Algunos productos llamaron la atención de los reguladores después de llegar al mercado. En febrero, la Comisión Federal de Comercio tomó enérgicas medidas con algunas aplicaciones para smartphones que aseguraban poder diagnosticar el melanoma a partir de una fotografía subida a la web. Entretanto, la Oficina de Salud y Servicios Humanos de Derechos Civiles de los Estados Unidos es responsable de controlar la seguridad de los datos de salud de los pacientes recogidos a través de dispositivos electrónicos, otra cuestión que está siendo estudiada con gran atención por los defensores de la privacidad.