GUERRERO.- Este sábado al mediodía ocurrió un enfrentamiento entre policías antimotines del estado de Guerrero y estudiantes de la Escuela Normal Rural Raúl Isidro Burgos, de Ayotzinapa, en el paraje conocido como Tierras Prietas, ubicado en la entrada norte de Chilpancingo, dejando como saldo de este primer choque varias personas heridas.
Antes del enfrentamiento, sobre la carretera federal Iguala-Chilpancingo, en un filtro de revisión instalado tanto por policías federales como por agentes estatales se detuvo a un convoy formado por dos autobuses y dos pipas de combustible, mismas que habían sido robadas y que los normalistas planeaban llevar a la Normal de Ayotzinapa, localizada en el municipio de Tixtla.
Los policías les quitaron a los normalistas las dos pipas y dejaron que los estudiantes continuaran su camino rumbo a Tixtla en los dos autobuses.
Sin embargo, más adelante, a la altura del distribuidor vial de Tierras Prietas, había otro retén de policías estatales, mismos que le marcaron el alto a uno de los autobuses en los que viajaban los normalistas, un camión Futura número económico 2755, que un primer momento no se detuvo, por lo cual los policías se pusieron en medio de la desviación de la carretera de cuota a Tixtla, lo que obligó al chofer a detenerse.
De la unidad se bajaron algunos de los normalistas y comenzaron a lanzar piedras en contra de los uniformados; algunos de ellos tenían palos y agredieron a los antimotines.
Este primer enfrentamiento ocurrió alrededor de las 12:00 horas de este sábado; las agresiones aumentaron de intensidad y se registró un fuerte enfrentamiento a golpes, pedradas y toletazos entre los normalistas de Ayotzinapa y efectivos de la Policía Antimotines del estado de Guerrero.
En estos hechos resultaron heridos varios policías, entre ellos un comandante, quien sufrió lesiones en la cabeza, por lo que fue llevado al Hospital General Raymundo Abarca Alarcón, de la capital de Guerrero.
De parte de los normalistas no se dio a conocer el número de heridos y a dónde fueron trasladados, porque la mayoría huyó hacia los cerros.
El autobús donde viajaban los normalistas quedó con varios cristales destrozados. No hay reporte de detenidos por estos hechos.
Una hora más tarde, aproximadamente, unos 80 jóvenes estudiantes de Ayotzinapa lanzaron bombas caseras e incendiaron la comandancia de la Policía Municipal de Tixtla, ubicada a unos minutos de donde se encuentra el plantel de la Normal de Ayotzinapa, quemaron una patrulla y una ambulancia; también destrozaron los cristales de la Dirección de Policía y de Protección Civil.
En este segundo hecho los estudiantes retuvieron a cinco policías municipales de Tixtla que estaban de guardia, los subieron a los autobuses y se los llevaron.
Después de estos hechos, los normalistas tomaron rumbo a Chilpancingo; con ellos viajaba un grupo de policías comunitarios de Tixtla, armados con rifles AR-15.
Hasta el cierre de esta edición ninguna autoridad municipal, educativa o estatal habían fijado su postura sobre los hechos.
Excelsior.-