PROGRESO.- El receptor Cristian Espinoza se vistió de héroe en la novena entrada al disparar sencillo de oro al prado izquierdo con lo que Alejandro Martínez anotó la carrera que dejó en el terreno de juego a los Reyes de Tizimín, en la victoria de 5×4 de los Tiburones de Progreso, que avanzó a la final de la Liga Estatal de Béisbol Naxón Zapata, ante un lleno en el campo Miguel Hidalgo.
Con su emocionante triunfo, los Tiburones ganaron la corona de la Zona Orienta de la Naxón Zapata y el boleto a la final, en donde enfrentarán a los Artesanos de Ticul. El primer juego de la final será el próximo domingo en la urbe zapatera.
En el inning decisivo, Martín Cortez ponchó a Tránsito Centeno y después también a Alejandro Martínez, quien terminó por embasarse en wildpitch.
Después, José Martínez sacó rodado difícil por las paradas cortas, pero Carlos Pisté la metió al monte lo que permitió el avance a segunda y tercera.
Con la mesa puesta, Espinoza vio pasar el primer lanzamiento que fue decretado como bola, para que en el siguiente disparo conectara sencillo al prado izquierdo para mandar a la goma la carrera del triunfo, mientras la fiesta comenzaba en el terreno de juego y en las gradas.
El triunfo fue para Amir Ibarra, mientras que la derrota fue para Cortez, quien entró de relevo por el abridor Freddy Guzmán. Por los locales abrió Alvaro Pacho y después siguió Eduardo Sabido, quien dejó el cerrito al ganador Ibarra.
Los Reyes fueron los primeros en romper el celofán en la cuarta entrada con jonrón de dos carreras de Carlos Pisté, quien encontró en los senderos a José Izquierdo, quien momentos antes había roto el sin hit a Pacho.
Los escualos se acercaron con una en el cierre, gracias a jonrón solitario de Pedro Gutiérrez.
Así se fueron hasta la séptima entrada en la que los Tiburones le dieron la vuelta en un santiamén. José Martínez se voló la barda con Centeno y su hermano Alejandro en los senderos, para poner la pizarra 4-2 a favor de los locales.
Sin embargo, Pisté volvió a explotar su fusil en la octava entrada, ahora con José Luis Graniel en los sederos para empatar los cartones a cuatro.
En la novena alta, el ganador Ibarra recibió la orden de pasaportear a Pisté para evitar que ganara el juego con un nuevo estacazo y la estrategia le rindió frutos, ya que Julio Toledo se ponchó con la casa llena para que después los escualos ganaran el juego.
Durante el partido, la directiva de los Tiburones entregó un apoyo económico a un ex jugador que tiene problemas de salud y los jugadores entregaron un reconocimiento al promotor José Cortés Góngora por su decidido apoyo al béisbol desde las ligas infantiles hasta mayores.-