MÉRIDA.- Los empresarios del Coliseo Yucatán planeaban festejar en grande el primer aniversario del recinto y para ello contrataron a Luis Miguel, pero un desatino del cantante dio al traste con esas buenas intenciones.
El festejo se planeó esperando un triunfo total y al final se llevaron un tremendo fracaso, porque el artista no se presentó ni dio explicaciones de su ausencia, aunque en el Coliseo unas nueve mil personas pagaron un boleto para ver a su artista preferido.
Aunque los empresarios dijeron que devolverían el dinero de las entradas, muchos que vinieron de otros estados y del interior del estado estaban muy molestos porque decían que aunque les devuelvan el dinero nadie les devolvería nlo que gastaron en pasajes y hospedaje.
Los empresarios impidieron a los reporteros que tomaran fotos y anunciaron una rueda de prensa para dar detalles del porqué no se presentó a cantar Luis Miguel, pero hasta las doce y media no habína dado la conferencia.