
MÉRIDA.- En una actitud irresponsable, Cablemas dejó plantados a decenas de clientes que acudieron a buscar su caja digital, a la improvisada oficina del Paseo de Montejo.
Varias empleadas llegaron pero sin decir nada se retiraron a las nueve y media de la mañana, media hora después de que debieron abrir la oficina para entregar las cajas digitales.
Nadie de Cablemas se presentó a decir la razón por la cual no abrieron la oficina. Una señora alcanzó a las empleadas cuando se retiraban y les preguntó porqué no abrían.
Una de ellas contestó antes de huir que no hay cajas digitales y que su jefe no les contesta el teléfono.
En la puerta de las oficinas se quedaron numerosas personas mientras que otras, aunque enojadas de retiraron.