Los canadienses acudieron a la Fiscalía para poner la denuncia. (Gillo porteño)
Los canadienses acudieron a la Fiscalía para poner la denuncia. (Gillo porteño)

PROGRESO.- Cuatro familias de canadienses que pasan el invierno en la zona veraniega de Chicxulub, Uaymitún y en la carretera costera a Telchac fueron víctimas de los ladrones, que se llevaron un botín de unos 100 mil pesos, entre equipos electrónicos y dólares.
Los robos se cometieron el lunes en la madrugada y por lo menos una familia de canadienses decidió volver a su país de origen, pues consideran que no hay la suficiente seguridad y corren riesgos.
Estos robos se dan cuando aún no se esclarece el asalto a mano armada a las oficinas de Telecomm, ubicadas en el centro de la ciudad, así como de otros robos cometidos en el puerto.
Los robos fueron cometidos en la madrugada del martes y tres de las casas visitadas por los cacos estaban ocupadas por los residentes canadienses; los ocupantes de la cuarta casa habían viajado a Mérida el lunes al mediodía y retornaron hasta ayer miércoles y se dieron cuenta que les robaron.
Los canadienses que estaban en las casas y cuando despertaron se llevaron la sorpresa del robo, se asustaron, pues corrieron el riesgo de que fueran atacados por los ladrones si éstos hubieran sido descubiertos por los extranjeros.
Como consecuencia del robo, al menos la familia integrada por Luisa Wheten, su hijo Chris y su nuera Lenny, ésta última originaria de Oxkutzcab, decidieron retornar a Canadá, pues consideran que hay inseguridad en el puerto, lo que no vivieron el año pasado cuando pasaron sus vacaciones en la costa.
A la familia Wheten le robaron una cámara fotográfica, una laptop, un ipad y el pasaporte de Chris, entre otras pertenencias, todo con valor de $25,000.
En la casa ocupada por Kate Mc Allen, quien colabora con el Banco de Alimentos de Chicxulub, que reparte despensas a las familias de escasos recursos de esa comisaría, le robaron una maleta de ropa nueva, una cámara fotográfica, un kit para medir la azúcar en la sangre, una laptop y dólares; el botín se calcula en unos $50,000.
A otra familia de canadienses, que declinó identificarse, le robaron también equipos electrónicos, celulares, dinero en efectivo y computadora portátil, cuyo monto es de $25,000.
Los afectados acudieron ayer miércoles en la mañana a la agencia de la Fiscalía para interponer la denuncia por robo.