MÉXICO.- Miguel Layún viajó a Inglaterra para reportarse con el Watford, el futbolista defendió que su decisión fue acertada, pues puso por delante sus deseos personales.
Miguel Layún emprendió ayer su segunda travesía a Europa, lo hizo convencido de que es mejor pelar por sus sueños de hacer carrera en el Viejo Continente —por más que vaya a un equipo de la segunda categoría en Inglaterra— y sacrificar las comodidades que le ofrece vestir la playera y el gafete de capitán en América, sacrifica el aspecto económico, pero su ambición deportiva es más fuerte. Dice que viaja más maduro y con la ¬firme creencia de que en esta ocasión su paso por el futbol europeo será diferente.
El defensa mexicano fue despedido por su familia, el núcleo sólido que lo apoyó en estos cuatro años en los que trabajó para forjar un nombre en el futbol mexicano. El ¬ final de su etapa en América tuvo un desenlace dulce, pues le tocó levantar el trofeo más reciente que conquistaron las Águilas, pero en el camino hubo un arduo proceso de superación de adversidades. Ahí estuvieron presentes sus padres, sus hermanas y su esposa, quien lo alcanzará en unos días cuando el jugador ya esté instalado en Inglaterra.
Miguel es un jugador que ha ganado peso, la gente lo tiene bien ident¬ificado. Repartió autógrafos y posó para fotografías. Sus últimos instantes en suelo mexicano fueron muy emotivos junto a su familia. Tiene muy claro que deberá pelear en el plano deportivo por objetivos bien distintos a los que tendría que encarar en México si hubiera decidido permanecer en América. Antes de emprender el viaje, Layún habló con la prensa y cuando se le cuestionó si emigrar al Watford no es un retroceso, su respuesta fue clara.
“Para mí no es un retroceso, la vida se vive una sola vez, hay que tener objetivos, quisiera que mi carrera fuera de 40 o 50 años, no puede ser así, nosotros (los futbolistas) tenemos que tomar decisiones acorde a lo que queremos vivir; tengo una ilusión grandísima de triunfar en Europa por lo que viví hace varios años, tengo la oportunidad con Watford ahora en la Championship y para mí es de mucho valor tomar la decisión de dejar todo lo que tenía aquí en México, creo que me había ganado el respeto de todos dentro y fuera de la cancha, había conseguido cosas importantes: títulos, un lugar en América, portar el gafete, cosas que no se dan sencillamente, y tomar la decisión de dejar todas esas comodidades de lado para buscar un sueño, una meta personal, porque hoy no me voy por dinero, no me voy por otra cosa que no sea un sueño, para mí es de mucho valor la gente sueños y creo que hoy lo estoy haciendo y por eso para mí no es un retroceso. Vale la pena sacrificar en lo económico y las comodidades que me había ganado en México para buscar este sueño”, respondió el defensa mexicano.
En la temporada 2009-10, (hace poco más de cuatro años) Miguel probó suerte en Italia con el Atalanta, fue una noticia que sorprendió, se convirtió en el primer jugador mexicano que jugó en la Serie A, debutó en un partido contra el Cagliari, solo jugó otro contra el Chievo, y acabó su periplo por Italia. Regresó a México con América y la lucha por ganarse un puesto y revertir los días negros.
Ahora que vuelve a Europa, Miguel dice que regresa “en un momento distinto al que viví en 2009, con muchísima madurez que me dio todo lo que viví con América, eso me lleva de una manera distinta, lo que he vivido me tiene que servir para llegar allá, hacer bien las cosas y buscar el objetivo que se tenga, no es fácil estar en equipos que presentan estrés por el tema del descenso, pero me llevo esa responsabilidad de aportar al equipo”.
Miguel se marcha con la maleta repleta en ideales, nadie le quita de su cabeza que la decisión es acertada. Este día llegará a Inglaterra, en la Championship arrancará su sueño de llegar a la Premier, de emigrar a la Liga Española o volver a la Serie A. Su mentalidad, pero sobre todo su futbol, deberá convencer a la familia Pozzo que puede estar en cualquiera de sus equipos.
La afición.-