Jessica Saidén busca la candidatura del PRI a la alcaldía de Progreso. (grillo nporteño)
Jessica Saidén busca la candidatura del PRI a la alcaldía de Progreso. (grillo nporteño)

MÉRIDA.- La selección de candidatos en Ixil, Telchac Puerto y Progreso ponen en aprietos a los dirigentes del PRI, ya que los candidatos no se ponen de acuerdo en el método de selección y a veces el CDE tricolor rechaza lo decidido por los delegados municipales.
En Ixil el delegado municipal dio la instrucción que los aspirantes decidieran como elegirían a un candidato de unidad y éstos decidieron hacer una interna; tenían ya listas las boletas, cuando el PRI estatal se enteró y canceló esa competencia, lo que ocasionó discusiones y malos entendidos.
En Telchac Puerto hay cinco aspirantes: Jorge Povedano Rosado, quien es y ha sido varias veces comisario ejidal y la gente lo tiene como un vividor del ejido; también ha sido tesorero y secretario municipal, entre otros cargos en las comunas. En cada elección levanta la mano para que le toque un cargo.
Otro aspirante es Juan Marrufo Díaz, comerciante, activista político de muchos años y quien fue alcalde en el período 2004-2007; es gente cercana a Ivonne Ortega Pacheco. Fue director de Jugos Natura del DIF estatal.
También aspira a la candidatura Geanine Cetina Luna, comerciante que tiene una licorería a la entrada del puerto, permiso que causo polémica ya que el expendio está a un costado de la caseta de policía municipal.
El cuarto aspirante es Andrés Cetina Chay, profesor jubilado que ya fue alcalde del puerto; no radica en Telchac, sino que sólo va los fines de semana; ha sido director de varios centros educativos CBTIS. Este aspirante no tiene contacto con las nuevas generaciones, de modo que es un desconocido para los jóvenes.
El quinto aspirante es Miguel Núñez Ojeda, comerciante ex tesorero de la actual administración municipal que preside Nueva Alianza; su incursión molestó a los otros aspirantes, ya que traicionó al partido al apoyar el proyecto de Nueva Alianza junto con otros priistas que le dieron la espalda al partido en las elecciones pasadas.
En Progreso buscan la postulación cuatro priistas y la unidad está lejos de lograrse. Quieren la candidatura Carmen Ordaz Martínez, cuya imagen quedó sumamente maltrecha debido a que se descubrió que un negocio de su propiedad le robaba “luz” a la CFE. Se dice que por este delito pagó muchas multas a fin de evitar una demanda federal por robo de energía eléctrica.
Además, a su esposo José Luis Blanco Pajón no le aprobaron sus cuentas cuando fue alcalde debido a que no justificó un gasto de cien millones de pesos. Sus padrinos políticos son Emilio Gamboa Patrón y Jorge Carlos Ramírez Marín.
Otra aspirante es Jessica Saidén Ojeda, quien trabaja fuerte, aunque muchos la ven lejos de las posibilidades de un espacio en el municipio porque ella es de Mérida. Sus detractores, en especial Blanco Pajón, la acusa de haber participado en la elección de 2012 para un cargo de regidora en la ciudad de Mérida, y quieren que compita por un distrito local o federal.
También aspira a la candidatura José Cortés Góngora, empresario, emprendedor y hombre del pueblo, venido de menos a más; está bien posesionado con la gente y apreciado por los diversos grupos sociales; no tiene padrino político y es promotor del deporte y apoya a la gente.
También aspira Julián Zacarías, un empresario que ha tenido problemas con tres empresas que administraba, pues los negocios tuvieron problemas financieros por lo cual fueron cerrados. Es trabajador, pero carece de experiencia política; es primo del actual alcalde Daniel Zacarías Martínez.
En el municipio de Tahmek, al parecer, ya quedo firme el que abanderara al PRI, Alfredo Puerto Manzanilla, debido a una hábil maniobra del delegado de hacer un recuento de gente entre cada uno de los aspirantes: convocó a una reunión y ganó el más gente llevó.