Kansas.- Gigantes de San Francisco se convirtió ayer en el ganador de la Serie Mundial de las Grandes Ligas de Beisbol al derrotar en el séptimo y definitivo partido a Reales de Kansas City por 3-2.
De esta manera, el cuadro de San Francisco ganó por tercera ocasión en los últimos cinco años el “Clásico de Otoño”. El triunfo se le concedió al relevista Madison Bumgarner (3-0), en tanto que el descalabro se le cargó al abridor Jeremy Guthrie (1-1) de Kansas City.
Con este resultado, los californianos se quedaron con el trofeo que lo acredita como campeones de las Grandes Ligas al adjudicarse la serie por cuatro juegos a tres.
Para San Francisco ésta es la octava ocasión en su historia que se adjudica el Clásico de Otoño, a cambio de 12 descalabros, y gana dos años después de haber “barrido” en cuatro juegos en la serie Mundial del 2012 a la novena de los Tigres de Detroit.
Fue el equipo de los Gigantes quien atacó primero y en la parte alta de la segunda entrada se puso en ventaja en la pizarra al anotar dos carreras.
El venezolano Pablo Sandoval se embasó al recibir un pelotazo de un lanzamiento descontrolado del abridor Jeremy Guthrie, Hunter Pence siguió con sencillo al izquierdo y Brando Belt llenó la casa con imparable al prado derecho.
El bateador designado Michael Morse envió a Sandoval a la registradora con la carrera de la quiniela con un elevado de sacrificio al jardín derecho y el parador en corto Brandon Crawford remolcó la segunda rayita de Gigantes al batear otro elevado de sacrificio al jardín central.
Kansas City no tardo mucho en igualar la pizarra, y lo hizo en el cierre de este mismo episodio cuando el bateador designado Billy Butler abrió con hit al central, el jardinero izquierdo Alex Gordon empujó la primera rayita de los reales con profundo doblete por el derecho. El receptor Salvador Pérez se embasó al recibir pelotazo en la rodilla.
El tercera base Mike Moustakas avanzó a Gordon con elevado al izquierdo lo que dejó el escenario para que el venezolano Omar Infante emparejara las acciones al enviar a la registradora a Alex Gordon con un elevado de sacrificio al central.