MÉRIDA.- El caso del sacerdote acusado de “desviaciones sexuales” comienza a tener más implicaciones, pues a la denuncia pública que hizo un joven de 20 años al que el presbítero Luis Arturo García Dávalos contactó mediante un chat para homosexuales, ahora se suma la denuncia penal por una declaraciones que hizo a la prensa un ingeniero, quien tuvo relación cercana con el misionero del Espíritu Santo.
Mientras el joven Denis Suárez, que hizo declaraciones a un medio local, sigue sin denunciar penalmente ni presentar pruebas contundentes de su acusación contra el sacerdote, una mujer, a cuyo hijo involucraron en este asunto, ya denunció.
De acuerdo con una publicación local, la señora Reina Beatriz López Herrera interpuso una denuncia penal en la agencia del Ministerio Público de Cordemex contra el ingeniero Alejandro Viveros Barea, por declaraciones a otro periódico.
Como informamos, Viveros Barea dio a conocer un testimonio donde revelaba más presuntas “desviaciones sexuales” de García Dávalos, quien por ahora no está en Mérida y permanece en la Ciudad de México.
Una de esas revelaciones fue que el padre comenzó a “enamorar” a un acólito al que halagaba con regalos caros, que luego el adolescente presumía por Facebook. Este caso llamó la atención porque la madre del menor siempre decía que estaban “fregados” económicamente.
En la denuncia que presentó por hechos posiblemente delictivos, la mujer afirma que es madre del menor de edad a quien hace referencia Viveros, quien declaró que el menor, de nombre Leonel, recibió regalos del padre García Dávalos, pero la denunciante afirma que es falso lo declarado por el ingeniero.
Le denunciante señaló que su hijo es acólito desde hace varios años en la iglesia del fraccionamiento Francisco de Montejo, y que el joven es muy querido por la gente.
Indicó que los señalamientos sobre su hijo son totalmente falsos, ya que jamás dejó a su hijo solo; ella lo llevó y lo esperó siempre que prestó sus servicios como acólito.
También dijo que con su dinero le compró a su hijo un aparato para hacer ejercicios, un teléfono celular y ropa deportiva, y es mentira que haya recibido estos objetos como regalo y mucho menos del sacerdote implicado en un escándalo sexual.
Por otra parte, se informó que la Procuraduría General de la República (PGR) haría un acta circunstanciada de las acusaciones públicas contra el sacerdote por actos presuntamente delictivos. Se aclaró que el acta no es una investigación oficial, sino es darse por enterado de que hay ese problema.
Fuentes de la PGR dijeron que para que se pueda abrir una investigación por los delitos de pederastia, pornografía y los que resulten se tendría que interponer una denuncia formal.
Como informamos, el Pbro. García Dávalos fue acusado por Dennis Vega Suárez, quien dijo que lo contactó vía celular a través de un chat para gays y le dijo que tenía una regla de oro: “Me gustan los niños, la pornografía y el sadomasoquismo”.
Supuestamente el sacerdote le envió fotos en las que está desnudo y lo estuvo buscando durante varios días para que tuvieran encuentros sexuales.
Dennis, quien no ha dado la cara ni denunciado penalmente, dijo que reportó estos hechos a las autoridades eclesiásticas de Yucatán, pidió dinero, aunque dijo que fue en broma, y no se lo dieron, de modo que acudió a un medio local.
