PROGRESO.- “No siento las piernas, me duele mucho, por favor que me ayuden”, le dijo el futbolista Benjamín Graniel Chablé, cuando un policía estatal lo ayudaba mientras esperaban la llegada de la ambulancia de la Cruz Roja, que lo trasladó al Centro Médico Americano para su atención.
El agente policíaco recordó que el futbolista, en medio del dolor que sentía, dijo que no sentía las piernas y que estaba semiparalizado de la cintura para abajo, al parecer por los efectos de la descarga eléctrica que le ocasionó el rayo que azotó en el campo de fútbol de Flamboyanes”.
El rayo que el domingo pasado alcanzó a Benjamín Graniel fulminó a José Carlos May Reyes, de 27 años de edad, quien murió por la descarga eléctrica en el terreno del campo de fútbol. “Caleco”; el extinto futbolista dejó a dos niños en la orfandad y fue sepultado el lunes en el cementerio de la colonia ejidal Paraíso, en donde vivía.
Benjamín Graniel, de 36 años de edad ya está fuera de peligro y el miércoles fue dado de alta en el Centro Médico Americano (CMA), en donde estuvo hospitalizado desde el domingo en la tarde; tardará varios días o semanas en recuperarse por completo y al parecer no tendrá secuelas, pues no sufrió de quemaduras internas, según explicó el médico internista Roger Fernando Tun Casanova, quien lo atendió desde el domingo.
El especialista recordó que el domingo se encontraba de guardia en la clínica, cuando le avisaron que en la sala de urgencias se encontraba un paciente que se quejaba de dolor en las extremidades inferiores.
“Sus familiares dijeron que durante la lluvia lo había alcanzado un rayo cuando jugaban fútbol y que había un muerto; me di cuenta que se trataba de un caso de fuerte descarga eléctrica”, recordó el doctor Tun Casanova.
El futbolista estaba mojado, se quejaba y lloraba de dolor al no poder mover las piernas, que se le engarrotaron por la electricidad que recibió en las extremidades.
El doctor Tun Casanova explicó que Benjamín Graniel tenía contracturas musculares severas en ambas piernas, de modo que no las podía mover, pues estaba paraparético, debilitado en las dos piernas; así estuvo 24 horas, tiempo en el que se le aplicaron analgésicos y medicamentos relajantes musculares.
Además para descartar problemas en los órganos internos, se le practico un electrocardiograma para detectar una arritmia cardiaca y se le hicieron pruebas del hígado, riñón y músculos, que arrojaron que no tenía quemaduras internas.
Benjamín Graniel, quien es empleado de Obras Públicas de la Comuna, presentaba una herida en la ingle derecha que al parecer le causó la electricidad al salir del cuerpo del futbolista.
El médico internista dijo que el rayo seguramente entró por los pies y salió en la ingle de Benjamín, y en el caso del otro futbolista en otra parte del cuerpo y fue mortal.
Indicó que el agua es un conductor de energía eléctrica y el rayo habría azotado en la tierra que estaba mojada y luego alcanzó a los futbolistas que también estaban mojados: el rayo entró y salió de sus cuerpos.
También indicó que las nubes son la parte positiva y la tierra el punto negativo; cuando ocurren las descargas eléctricas durante las lluvias, los dos puntos se atraen, chocan y ocurren los truenos. El galeno dijo cuando llueve no es recomendable resguardarse bajo los árboles porque son los puntos más cercanos con el cielo y donde caen los rayos.