Venancio Solís fue atendido por paramédicos de la Cruz Roja, pero no pudieron llevarlo al hospital debido al estado de ebriedad en el que se encontraba. (grillo porteño)
Venancio Solís fue atendido por paramédicos de la Cruz Roja, pero no pudieron llevarlo al hospital debido al estado de ebriedad en el que se encontraba. (grillo porteño)

PROGRESO.- Herido al caerse en completo estado de ebriedad y sin poder caminar debido a los golpes y a la borrachera, paramédicos de la Cruz Roja y policías municipales no sabían qué hacer con Venancio Solís Aguilar, pues por su estado no lo podían llevar a su casa y debido a las heridas no querían llevarlo a la cárcel, porque podrían infectarse. Finalmente lo llevaron a su casa.
En completo estado de ebriedad, el ex líder de los artesanos Venancio Solís tropezó ayer en la tarde cuando caminaba en la calle 76 entre 29 y 31 y al caer se rompió la cabeza y comenzó a sangrar profusamente.
Como pudo se levantó y dando tumbos avanzó una esquina, pero por su ebriedad y los golpes en la cabeza, piernas y los brazos, no pudo continuar su marcha hasta su casa, ubicada en la calle 80 entre 33 y 35.
Venancio Solís, de 52 años de edad, se sentó a un lado de la calle y al verlo, vecinos llamaron a la policía, pues pensaron que lo golpearon.
Los paramédicos de la Cruz Roja Adonai Ávila Hernández y Eulogio Mukul Matú atendieron a Venancio, lo curaron de las heridas, pero debido a su estado de ebriedad, dijeron que no lo podían llevar al Centro de Salud, porque ahí al ingresarlo por norma piden que esté presente un familiar.
“La herida no requiere de sutura, ya lo curamos, pero no lo podemos llevar al Centro de Salud, nos van a preguntar por sus familiares, pero así como está no puede dar más detalles”, le dijo un paramédico a Faustino Ku Oxte, agente de la policía municipal que llegó para tomar nota del caso.
Tampoco lo puedo llevar detenido, dijo el agente, porque no hay delito y menos para que se le pase la borrachera, que tal si se le infecta la herida en tremendo lío que nos metemos.
Finalmente los policías llevaron a Venancio a su casa.