MÉRIDA.- Marco Antonio Madera Chan denuncia que su papá Jorge Madera Baquedano perdió la pierna derecha debido a que el 14 de mayo pasado, luego de que lo atropelló Rita Chuc, en la clínica Ignacio García Téllez del IMSS no lo atendieron durante cinco horas, aunque tenía una fractura expuesta.
También afirma que la aseguradora de Bancomer, con la que la causante del accidente tenía un seguro, se negaba a pagar los gastos médicos del afectado y el ajustador y el abogado de la seguradora Pedro Roberto Sánchez Camargo y Henry Burgos ponían como condición para atender su papá que firmara el perdón de Rita Chuc.
Los parientes del herido no firmaron el perdón y lo llevaron al CMA, en donde depositaron 10 mil pesos para que atendieran al herido. Ahí le amputaron la pierna, la cual se la querían dar a los familiares, quienes acudieron a la Secretaría de Salud, donde les dijeron que era responsabilidad de la clínica deshacerse de ella.

Una vez en el CMA Seguros Bancomer tuvo que pagar los gastos, pero cuando Madera Baquedano abandonó la clínica le dijeron que ya no lo atenderían porque la Aseguradora Bancomer no iba a pagar más gastos.
El quejoso dice a su papá que le prometieron una prótesis y pagarle la rehabilitación, pero desde mayo, luego de que el afectado salió de la clínica del CMA lo abandonaron y nadie de la seguradora ha dado la cara.
De acuerdo con el denunciante, el accidente se debió a que Rita Chuc hablaba por teléfono celular de modo que se distrajo y no vio que tenía luz roja del semáforo.
“Mi papá necesita una silla de ruedas, un burrito, una andadera, muletas y terapia psicológica, ya que no es fácil que tu vida cambie de la noche a la mañana”, indica Madera Chan, quien afirma que le prometieron una indemnización por la pierna perdida y la totalidad de los gastos médicos. Madera Baquedano vive en la calle 24, No.334 entre 79C y 81A, de la colonia Vicente Solís.