MÉRIDA.- Alejado de la gente, pero cercano al poder en el PRD local, el flamante diputado federal Alejandro Cuevas Mena se apresta a colocar en la presidencia del partido del Sol Azteca a una persona más de su confianza, además de sus familiares que están en la directiva perredista y de los que tiene incrustado en varias esferas oficiales como el Poder Judicial y el Ipepac.

El diputadito, que puso su casa de enlace casi cerca del periférico poniente para que la gente no vaya a molestarlo y por tanto no dé ningún apoyo, colocará al tibio, gris y sin trayectoria política Nélson Mex Cab como presidente estatal del  partido del Sol Azteca.

Con esta nueva incrustación, Cuevas Mena asegura que sus parientes y hasta su nana, que lo cuidó de bebé en su natal Halachó, siga en la nómina de la directiva estatal del PRD, donde está su tía Lupe Balazos, su tío Lucio y su nana Lupita. Todos ellos llegaron a la nómina perredista cuando Cuevas Mena fue presidente estatal de los amarillos.

Como han hecho otros perredistas que fueron diputados locales, antes y después de Cuevas Mena, cuando el ahora diputado federal fue legislador local vendió su voto al PRI, ya que ellos por ser siempre una ínfima minoría no deciden nada, pero ayudan al tricolor a lograr mayoría absoluta.

La habilidad de Cuevas Mena, a quien numerosos perredistas acusan de bajar recursos pero exigir 20% de diezmo a los alcaldes que les da el dinero, es la de colocar a sus familiares en nóminas oficiales.

Cuando fue diputado local colocó a su hermano Gonzalo como jefe de Recursos Humanos del Poder Judicial;  cuando se integró el Ipepac Cuevas Mana colocó a su cuñada Teresa Cab como directora de Fiscalización. En esa época también puso en la nómina del Ipepac a su prima Rubí Mena Pam y en la del Congreso del Estado a su esposa tabasqueña Karina Gaviro.

Con el dinero que amasaron y siguen amasando los esposos Cuevas Gaviro compran ranchos en tabasco y se dedican a acrecentar el patrimonio familiar.