PROGRESO.- Los pasajeros del crucero Carnival Triumph derrocharon alegría y dólares ayer en el malecón de Progreso, pues los niños y jóvenes que llegaron realizaron diversas actividades mientras sus papás tomaban cervezas o recibían masajes.

En esta ocasión, el barco trajo a un centenar de niños, que viajaron con sus papás, corrieron en la playa, se enterraron en la arena, elaboraron figuras de arena y se bañaron en el mar. También compraron globos y golosinas que vendieron los ambulantes.

A su vez, los adultos se recostaron en los camastros, otros en grupos se sentaron bajo las palapas donde consumieron cervezas y botanas, en tanto que otros solicitaron los servicios de las masajistas y los hubo que agradecidos por el buen servicio dieron buenas propinas.

Un pasajero que habla español y quien mientras recibía un masaje relajante platicó que se dedica al comercio en ciudad texana, donde prepara comida diversa y sus principales clientes son los ilegales. Al final del masaje le dio 15 dólares de propina al masajista José Güémez, quien los llevó a un supermercado a comprar equipo que necesitaba para que sus hijos se metieran al mar.

El buen clima animó a los pasajeros jóvenes a jugar vólibol playero en improvisada cancha instalada en la playa del malecón. Otro grupo juvenil bailó mientras consumía cervezas y tequila y la música contagio a varios adultos  que también se pusieron a bailar ante la mirada y aplausos de sus compañeros de viaje y prestadores de servicios.