MÉXICO, DISTRITO FEDERAL, 11 de Febrero de 2014.- La Cámara de Diputados aprobó reformas para elevar hasta ocho años de prisión a quien simule un secuestro, con la intención de conseguir beneficio económico, causarle daño, u obligar a sus familiares a realizar un acto cualquiera.
El coordinador de los diputados federales del PRI, Mauricio Sahuí Rivero, informó que las modificaciones aprobadas a la Ley General para Prevenir y Sancionar los Delitos en Materia de Secuestros fueron turnadas al Senado de la República para su ratificación.
“La existencia de más casos de secuestros simulados ha llevado a la necesidad de modificar las sanciones para castigarlo, dándole a la autoridad mecanismos para su persecución” explicó.
El dictamen señala que la sociedad ha evolucionado y la delincuencia ha encontrado maneras más sofisticadas de dañar a las personas, de modo que al imponer una sanción mayor para quienes comentan dicha simulación, se evita la repetición y facilidad con que pudieran llevarse a cabo estos actos.
Al abundar en el tema, dijo que el documento aprobado indica que el artículo 13 señala que se impondrán de 200 a 700 jornadas de trabajo o de tres a seis años de prisión al que simule por sí o por intervención de otra persona, la privación de su libertad. En la actualidad sólo se consideraban penas de hasta 100 jornadas de trabajo.
En el artículo 14 se especifica que se impondrán de tres a ocho años de prisión al que simule la privación de la libertad de una persona, con intención de conseguir beneficio económico, causarle daño, u obligar a sus familiares a realizar un acto cualquiera. En la legislación actual se consideran de dos a ocho años de prisión.
Sahuí Rivero hizo notar que el autosecuestro se ha convertido en un fenómeno que se repite; por ejemplo, en parejas en conflicto que solicitan cantidades de dinero para solventar gastos extras o personas que intentar llamar la atención de sus familiares.